viernes, 29 de abril de 2011

Hoy tampoco es 14 de Abril: ¡Viva la República!

Con la II República se inició un camino de progreso que deslumbró a Europa, y me duele no poder saber dónde podríamos estar ahora, pero tengo la certeza de que muchos de esos países… nos envidiarían.

Pero no os equivoquéis: no quiero parecerme a nadie, acaso ser yo mismo, y eso es lo que siento me robaron con la sublevación del 36: me negaron mi derecho a elegir, a ser libre.

Después, durante más de cuarenta años, a sangre y fuego, me recordaron cada día lo que suponía intentar ser yo mismo y vivir con el miedo a diferenciarse, a tenerse respeto.

A veces, cuando veo la sumisión de la sociedad en la que vivo, recuerdo aquellos buenos hombres y buenas mujeres, que vivieron en la negrura mugrienta de la dictadura, viendo romperse sus sueños como cristales… hasta que se acostumbraron a ello.

Quizás sea por eso, que me enorgullezco tanto de aquellos otros y otras, que en las mismas condiciones, no tiraron la toalla y fueron capaces de rebasar sus propios límites y los cruelmente establecidos, para seguir fieles a su derecho de vivir en paz.

Eso, que entiendo como calidad humana, me ayuda a sobreponerme cuando oigo a tanta gente muda, de tanto gritar en silencio, porque sé que se puede ser de otra manera, que se ha sido de otra forma en este mismo País.

Así nos lo legaron hace ahora 80 años, las republicanas y republicanos de nuestro País y no dejaré de poner mi granito de arena... para que no se pierda.

A veces, cuando reparo en la sumisión de la sociedad a la que pertenezco, por un momento se me encoge el alma. Se me pasa enseguida... porque sé que soy responsable de lo que decido cada día, de mi actitud con lo que me ocurre, de mi rebeldía y de que no me quitaran las ganas.

E.

No me preocupa el grito de los violentos, de los corruptos, de los deshonestos, de los sin ética. Lo que más me preocupa es el silencio de los buenos... (Martin Luther King)

1 comentario:

xanti dijo...

Salut y República compañero…… como me gusta que seas tan rojo, aunque hables desde lo personal. Yo me enorgullezco de ti, disfruto de ti, contigo entiendo que conocerse, transformarse desde dentro, no significa encerrarse en una capsula de egoísmo, que no hay nada que justifique el silencio ante lo que no es justo. Que nada te quite las ganas porque entonces perderás esa sonrisa de pillo y eso que ni se t eocurra.
Un beso
Santi
P:D. El tejado de la foto es del molino??